que impotencia el darme cuenta de que no estoy entendiendo lo que me pasa y mucho menos por qué me pasa, busco razones y no las encuentro, simplemente la sensación me invade y no me deja tranquila. Pero en estos casos simplemente prefiero cerrar los ojos y esconder mi cabeza entre mis rodillas para imaginar que todo está bien, o intentar engañarme a mi misma que los sonidos que escucho son otros, que las personas que me rodean son otras , que el tiempo que me rodea es otro, que quizás incluso la persona la cual soy es otra . . .
Es realmenre agradable en ese momento. Puedo lograr emprender ese viaje, y realmente me conforta aunque dure un par de segundos. Pero la caída a la realidad es dura; realmente duele mucho.
Pero en fin .. juré no escuchar fantasmas del pasado . . .
