sábado, 21 de noviembre de 2009

apágalo. [song]

Me rasmillé las rodilas mientras estaba inclinada rezando, y encontré un demonio en mi iglesia, en mi salvacion. Se me está haciendo dificil creer en alguna cosa, porque me termino perdiendo en todos mis pensamiento egoístas. Quisiera saber lo que le gusta, encontrar perfección en mi orgullo, para nopoder ver nada en la luz,y apagar todos mi rencor..
Y la peor parte es que antes de conseguir cualquier cosa soy arrollada como por una roca. Y en la caída libre voy a entender que voy a poder superarme y ser mejor solo cuando toque fondo, cuando golpee el inferior.
La tragedia parece interminable, estoy mirando a cada uno, miré hacia arriba para así quebrarme, y en el doblamiento tomamos cortes cortos, soluciones falsas, para que recortemos y salga a luz el supuesto heroe.
Bien, pero yo puedo ver detrás de la cortina. Las ruedas crujen, girando. Esta completamente incorrecto, casi todo mal , en el modo en que trabajamos. ¿Para qué? Por un objetivo que no existe... no es existente.. pero nosotros solamente.. seguimos creyendo.
Encontrar perfección en mi orgullo,
No ver nada en la luz.
Apagar todo mi rencor,
Todo mi rencor.. lo apagaré.. otra vez.

jueves, 19 de noviembre de 2009

arcoiris indescriptible.

Algo completamente nuevo, completamente indescriptible, algo que no conocía. Creí haber sentido toda clases de emociones en mi vida, pero al sentida ayer no se compara a nada, o quizás a poquísimas cosas. Era el momento de presentarme, estaba a punto de subir al escenario, sentía que se me iba a olvidar todo, por suerte estaba la persona que más quiero al lado mío para decirme como siempre que nos iba a salir increíble. Juro que no era simplemente una presentación, era el momento indicado para demostrar y expresar tantas cosas que hace tiempo quería mostrar o aclarar; cosas que solo se dan en momento claves. Me subí, y escuchaba una oleada de gritos de amigos y compañeros, de gente que ni siquiera me conocía, de mi familia. Y muy de la nada, pasé de un estado de pánico escenico a algo indescriptible. Sentí realmente que el pecho se me agrandaba a un punto en que se me iba a reventar, sentía que dentro mío fluía un arcoiris, una sensación de estar realmente en un momento IDEAL, que por suerte era REAL. Un momento perfecto, una sensación perfecta, junto a la persona que para tí es perfecta. Se fueron todos lso temores, sabía que podía ser la mejor, sabía que tenía de mostrar y hacer relucir en arcoiris que sentía en mi interior. Y lo saqué como pude, sin quedarme satisfecha de que haya durado tan poco, porque tan solo había podido liberarme de un poco del arcoiris que estaba en mi interior. Luego de presentarnos, también volvieron los aplausos, los gritos, EL BESO. Las felicitaciones, la hiperventilación, la satisfacción, la comprobación, pasar de creer ser un poco buena a saber que uno puede ser bueno,a saber que realmente lo que uno quiere puede hacerlo, pero realmente hay que quererlo con todo el corazón. Y este día fue una de las pocas cosas que realmente he querido llegar a hacer o a cumplir dentro de toda mi vida. Fue una experiencia inigualable, increible, completamente nueva, completamente gratificante.

peace for everyone.

sábado, 7 de noviembre de 2009

alienación . . .

Un rayo de luz me bañaba la cara, insolente, forzándome a despertar, a moverme, a estirar mis aletargados músculos y buscar la forma de que no molestara más. Me acomodé, mirando a todos los lados, a todas las direcciones, buscando comprender donde estaba, como había llegado allí, pero no pude comprenderlo. Todo parecía extraño, nuevo; me sentí como un bebé que recién nace y ve al mundo con sus ojos inocentes, inexpertos. El vestido blanco que llevaba no hacía más que reforzar este pensamiento. No corría brisa. Cerca de mí, unos pocos árboles se alzaban penosamente, obligados, forzados, y no hacían ningún esfuerzo por moverse, por crear ese aire que tanto me faltaba. Necesitaba algo de luz, algo de visión, algo de esperanza, algo que me guiara, que me diera una idea de que hacer en este mundo tan extraño. Peor la única luz que había me quemaba, lo único que veía era desierto, ruinas, suciedad, y la esperanza parecía tan lejos como la luna que estaba embelleciendo noches por allá, muy lejos. Unos pasos interrumpieron mi breve pensar. Pensé que sería la ayuda que esperaba, el ángel que, en las historias, bajaba del cielo a tender una mano a gente como yo. La figura se iba haciendo nítida, poco a poco, aunque su cara quedó cubierta en sombras; en sus manos, respuestas que refulgían con hermosos colores parecían estrellas en la noche que estaba viviendo. Tendí la mano esperando que me entregara una, que compartiera conmigo eso que para ella no significaba nada pero que para mi era mi todo; mas todo lo que recibí fue una mirada de desprecio, odio, asco, antes de que se alejara de mi, sin darse una vuelta atrás, sin mirar una vez hacia mi, sin sentir ningún remordimiento. Y me quedé allí, abandonada, sintiéndome incluso más sola de lo que me sentía antes. Ese día, vagué por las calles, sola, acompañada solamente del cielo que ahora se había vuelto gris, y de una brisa que me traía lágrimas de gente como yo. Seguía sin entender, sin comprender, sin reconocer nada de lo que frente a mis ojos pasaba. Pero pude ver muchas cosas. Vi la agresividad entre parejas que se amaban, que discutían por cosas que no valían la pena, y que dejaban que la ira actuara por ellos. Vi gente triste como yo siendo abusada por otros que se creían mejores pero que no eran ni su polvo. Vi como las personas rechazan a los diferentes, como mi vestido blanco me aislaba de los otros. Las hojas de los árboles caían a mi paso, no sé si por pena o simplemente por respeto. La maldad, la ambición de las personas que han olvidado lo que de verdad es importante; la ignorancia, el afán de causar daño, y el egoísmo de quienes piensan tienen más, cuando en verdad… en verdad, son los que valen menos. Mis pies me ardían de tanto caminar, de tanto buscar algo que valiera la pena en este triste lugar en que me vine a despertar. Me sentía desvanecer, irme; sentía como mis ojos se cerraban y mi mente volaba allá, lejos, donde yo no podía llegar. No tenía nada más que hacer. Cuando tras doblar una esquina oscura, logré ver un parque, con algo de verde que aún quedaba vivo, me dirigí hacia el, me acosté y me dispuse a dormir. Quizás tenía más suerte cuando despertara esta vez. Y en ese momento me dormí otra vez.



Y en Parte, a este cuento ligado con el video y las cartulinas, merecemos el 7O en filosofía !
Primera semana de noviembre INCREIBLE .